Batania, Bonilla y Ramos en La Noche de los Libros.



De entre toda la oferta cultural de la noche del miércoles en Madrid, que tampoco es tanta si descartamos a los retablos que llevan treinta años diciendo lo mismo en los dominicales, el acto con mayor calado y trascendencia de la provincia va a ser este con diferencia. Me ha tocado recitar con dos monstruos de las letras que no hace falta presentaros porque les conocéis de sobra, así que voy a estar con la mejor compañía posible que se pueda tener en el ámbito poético. Y lo digo en serio. Y lo sabéis sin que yo os lo diga.

Está claro que a mí me han invitado para que arrastre al público preadolescente femenino y que mientras yo recite, sus padres consuman de lo lindo en la barra mientras lamentan el día en que sus hijas me vieron por primera vez en televisión. Me han escasillado, qué le vamos a hacer.

Otro de los fuertes del acto será poder probar las famosas croquetas del Chef Manu, que han inspirado el logotipo de la edición de este año 2014 en un clarísimo guiño de complicidad a los fogones del Vergüenza Ajena.

Por todas estas razones y porque vamos a pensamos ir duchaos, venirse.